Y ahí estoy otra vez, soprendida por esas líneas. Las leí sin pensar si quiera si quería hacerlo, pero tuve el impulso y me sumergí en ellas. LLoré, reí, me angustié, me calmé, me sentí estúpida, y a la vez gané, que si me arrepiento? No, para nada. Si tengo que hacer un balance de lo que dejaron diría que "entendimiento".

La valentía es un don que no todos tenemos, mucha gente es valiente por inconciencia y otra, la más valiosa a mi entender, es porque están en totales facultades de asumir lo que ello implica. Sea cual fuere el caso, es el sentimiento de jugarse, de convertirse en muralla y esperar a que las olas te golpeen: acá estoy venga lo que venga, sea lo que sea que el karma me quiera cobrar, esperando a la intemperie porqué no sé si va haber sol o una tormenta de los mil demonios. Y no pienso dar ni un solo paso al costado.